A ma fenêtre
aux rubans ardents.
aux rubans ardents.
Tango de dos azules,
milonga de caderas,
y de verano el temblor desbocado.
Tango el vicio de ti,
y en el farol no es oficio la sangre,
allí maté los celos de tus grietas.
Tango del no hay olvido,
cada noche cerca y yema la nota
húmeda de tu cuerpo.
Tango son los quince gritos de agosto.
y de verano el temblor desbocado.
Tango el vicio de ti,
y en el farol no es oficio la sangre,
allí maté los celos de tus grietas.
Tango del no hay olvido,
cada noche cerca y yema la nota
húmeda de tu cuerpo.
Tango son los quince gritos de agosto.
5 comentarios:
Delicioso poema, y acompañado de la música de Piazzolla...un sueño.
Me has recordado que la ponga en mi blog.
Un beso de domingo José María.
Mañanita de domingo.
Tulipanes.
Verano y azul.
Un hermoso poema.
Y un tango de piazzolla...
Ybesospormil.
Tango ... la piel que roza, siente, vive, sueña, ama
Oblivion ... la suave brisa que ambos cuerpos encuentran en el suave roce que se desliza
Agosto de Nocturnos
Besos de susurros
Casi se bailan tus versos, evocadores y tangueros.
Enhorabuena.
Un abrazo, José.
Leo
Sin palabras, sólo leo y escucho. Un verdadero placer esta melancolía.
Besos, quince.
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