viernes, 2 de septiembre de 2011

Intermezzo de abolición

Aboliremos la nostalgia y las cuevas de Altamira, aboliremos la playa, las olas y, cómo no, también los lagos, aboliremos las esquinas, sobre todo las que no tienen cara de esquina, aboliremos el cristal y la frontera entre nada y nada, aboliremos el revés del espejo y la intermitencia de las dudas, aboliremos las caderas que no sean tuyas, aboliremos el umbral entre verde y amarillo y también los colores, aboliremos lo que se tiene que hacer y lo hecho, aboliremos los versos previsibles, aboliremos la infidelidad y la fidelidad, y también los colchones, aboliremos las lagrimas y las risas sin sal, aboliremos todo y su contrario, aboliremos incluso lo que no existe y el amor, ça va de soi, aboliremos el aburrimiento y el happy end.

6 comentarios:

Marián dijo...

Precioso...Jose Maria...por todo...por los "aboliremos"...y por esa cita de Nietzsche...y...por la potencia intelectual que está en ti...que me alumbras como el sol de la mañana...lo diviso a lo lejos...entre brumas...pero sé que está ahí...como tú...
Besos.

María Socorro Luis dijo...

Bueno, por lo menos nos quedamos con unas caderas... ya es algo.
Y con tu estupenda manera de escribir.

Aboliremos también los besos?

Anónimo dijo...

Fírmalo, reafírmalo y tal vez crea en happy end ;)
Besos Amadeus.

José María Alloza dijo...

Gracias Marian, me dejas sin palabras.
Besos

José María Alloza dijo...

Bueno para los besos, haremos una votación popular ;-)
Gracias Soco, besos

José María Alloza dijo...

Nada de nada, jubilaremos sin piedad al happy end
Besos Res